Resulta que después de más de un mes de no escribir nada, el martes pasado sucedieron un par de cosas incómodas que terminaron en alivio, lo que me inspiró a escribir este blog. Espero que alguno de ustedes se sienta identificado.
Estaba el martes grabando unas voces para un musical infantil, y entre el intento de hacerme sonar como escuincle de primaria, logré encontrar una voz garrafal de viejita diabólica!, (que espero nunca dejarla salir jamás).pero dijeron los que grababan que sonaba bien, (después de ese comentario, no quise imaginarme, ni preguntar que tipo de niños estaban en la obra).
En fin, pasaron las horas de estar parada y parada y parada, echando la voz al micrófono. Después de un rato se me ocurrió quitarme los tenis! y empieza la lista...
1. NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!! Qué increíble sensación!! Puff hasta mi voz se volvió angelical... (tuve que volvérmelos a poner para grabar). Y fue en ese momento que me acordé de lo placentero que es llegar a tu casa y quitarte los zapatos, cuando llegas de caminar horas en el centro, o que estuviste parada en un concierto, o esperando en una cola de algo. Te los quitas y tus pies se desparraman, sueltas el clásico Aaaaaaah! y cuando sientes el suelo.. es de lo mejor!... y si venías del calor de la calle y te quedas descalzo sobre el piso, se multiplica la sensación! (aunque digan todas las abuelas que hace daño). Y si son botas, tacones, muchas agujetas o algún nudo extraño...mm más bien si te aprietan los zapatos.. el placer es aún mayor, huy!
2. Después de ese fenómeno, seguimos paraditas grabando un ratoooote, y cuando terminó mi turno tomé una silla y me senté! puff!! NOOOOOOOO, de nuevo esa sensación! Qué celestial, es poner tus pompas en una silla después de horas de luchar contra la ley de Gravedad, es una cosa increíble y que muchas veces se nos olvida; sentir como se relaja el cuerpo, te dejan de doler las piernas o de tensar. Ya ni cuenta te habías dado de como tu cuerpo estaba luchando por aguantar tremenda postura y tremendo peso completo... Entonces recordé también lo que es estar esperando horas de pie y que te hagan canchita en el piso, en un escalón, en las barditas (aunque te bajen), en las banquetas, y bueno si hay silla pues que mejor. Las colas en los juegos mecánicos que además de ser lentas y laaargas, no te dejan subirte al barandal, o cuando estabas en las ceremonias de la escuela que pasaban horas diciendo poemas, plegarias, odas, canciones y tu, bajo el rayo del sol, vestidito de galísima y pensando en tu dura silla del salón que te esperaba. Las largas colas en los trámites, pasaporte, visa, actas de nacimiento, registros, pagos, boletos... todo y sin sillas. Sí, a veces las colas nos hacen la vida difícil y dolorosa... las innumerables horas de vida que gastamos en las colas y de pie...*
Y después de ahí me clavé, con todas esas cosas que pasan de los más sencillo que te hacen sentir un alivio increíble.
3.Cuando estas en una fiesta o reunión o lo que sea, las clásicas posadas familiares que son con todo y cantada, piñata, cuetes, luces de bengala, esperar a que la abuela salga, que alguien vaya por la cámara de video o fotos, que se impriman las letras de las canciones, que falta un primo, que el tío Grinch no quiere venir, y mientras, que el frió se te cuele. También en los conciertos aplica, ¿Quién no ha ido al foro Sol y pasado frío?, que aunque haya un tumulto de freaks como tu, el frió te llega. Bueno en fin en todas las actividades que sucedan al aire libre a una temperatura menor a la que tu suéter pueda soportar, o en su ausencia lo que tu capa de grasa corpórea pueda protejerte.. y te mueeeeres de frió horrible, no hay ni cómo huir, ni cómo taparte. Tratas de distraerte, de moverte, de hacer calor humano y ya si nada funciona, te resignas y te haces el aclimatado, aunque tus manos y tus pies digan lo contrario, piensas mil veces en la chamarra que dejaste en el coche, o la sudadera que estabas por llevarte pero por flojera de cargarla decidiste dejarla (Ni frió va hacer). Lo único que te hace mantenerte sin gritarle al !"·$"%& frió, es lo "cero cool que te vas a ver" si lo haces, por que dicen los sabios que: "aguantar el frió es la primera prueba para ser rocker y/o emo", la otra razón por la que te aguantas, puede ser por lo bueno que está la fiesta, concierto, cola?, reunión... pero al final la esperanza de todos en este momento, es saber que llegará un punto en el tiempo dónde recuperes tu calor, ya sea en el coche, en tu casa, en el metro, en le taxi, en el camión, cuando encuentres un refugio o un algo para taparte. Y al llega ese momento, puff! de los mayores alivios!... te deja de salir moco de la nariz, dejas de estar todo comprimido casi apretando hasta las pompas.
4. Otro de los grandes alivios; es el clásico,( o bueno mi clásico), que sales en la noche y ya como después de un rato en que tomaste lista en la vida nocturna social, se terminó la parte interesante de la noche o de plano ya te cansaste por la onda de los tenis, las sillas y el frió, empiezas a quedarte dormido. Sin darte cuenta, te pican los ojos, empiezas a cabecear, ya no pelas a quien te hable, te recargas de ladito y sin darte cuenta ya te estas acomodando... te estás cayendo de sueño, y eso no es lo peor, nadie para de enfiestar, de platicar, de bailar y crees que nunca va a terminar pues parece que cada vez todo se pone mejor, la música se pone más fuerte, los borrachos están en la cúspide, la gente no deja de entrar, los que bailan ya tienen coreografías... y tu haciendo todo lo posible por no cabecear, que no se te vayan los ojos al bisco, que no se vea la onda de ya estás en horas extras y que en lo único que piensas es cuando te metas a tu cama. Estás sólo esperando que alguien se le ocurra hacerte segunda para poderte ir y checando a que alguno de tus amigos haga la mínima señal de cansancio para poder llegar a tu casa ... pero cuando llegas a tu cama!!!!!... es como quitarte los zapatos, sentarte en la silla o quitarte el frió
5. Este evento, creo que es el más conmemorativo y real para explicar las sensaciones anteriores, digamos que ocupa el TOP de todo ser humano. Y ... es cuando llegas al BAÑO!.. esas veces que llevas minutos, muchos minutos tantos o tan pocos pero con tanta urgencia, que ya haz perdido la cuenta o más bien prefieres ni llevarla. Ya no aguantas, llevas un ratote buscando cualquier lugar dónde puedas pasar, pero no hay, no hay McDonalds que te salve, o vips, o cualquier lugar donde te presten el baño, ningún amigo vive cerca, y no hay manera de llegar más rápido. Los semáforos duran el doble, tus pasos son chiquititos, la gente maneja horrible y camina peor!,( nadie tiene prisa mas que tu!), las distancias son como las canchas de futbol de SUPERCAMPEONES todo se vuelve lento y lejaaaano. Tratas de no pensar en eso, piensas en miles de cosas que al final y sin decisión propia, te llevan al mismo lugar. Mientras avanzas buscas opciones mas cerca y al no encontrarlas te mentalizas a que esta lejísimos para que sufras menos, pero.... cuando ves que ya estas a nada, la urgencia se vuelve peor, el cuerpo se revela a tu "toque de queda" y comienza a relajarse... y en eso llegas! gloriosamente corres!! y te relajas... dejas el control Mental y todas las técnicas de concentración a un lado y aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa... se te olvida si dejaste las llaves pegadas en la puerta o el coche prendido, si se salió el perro, si había alguien en tu casa, si la señorita del café te vio feo, si era el baño equivocado, si había papel o no... glorioso baño.
* Existen unos bastones con silla integrada que es una buena manera de resolver este tipo de situaciones incómodas.
En fin, pues así cierro este blog, sigo buscando más de estas cosas que hacen sentir extremos opuestos tan placenteros y tortuosos a la vez.
